Transgenia
¡Pasen y vean!
¿Le gustaría ser más rápido, más inteligente, más fuerte, más longevo, poder volar, y respirar bajo el agua?
¿Quizá preferiría tener ojos de otro color, o visión en la oscuridad?
¿Si usted fuera ciego y le propusieran un nuevo método como el sonar de los murciélagos para ver, no intentaría conseguirlo?
¿Y si le faltara una pierna y le prometiesen que esta iba a regenerarse a cambio de un simple tratamiento?
¡¡¡BIENVENIDOS AL MARAVILLOSO MUNDO DE LA TRANSGENIA!!!
Todos ustedes ya están en este mundo, comen alimentos transgénicos aunque no lo sepan desde hace años, y aunque aún no les han inyectado genes fluorescentes para que puedan tunearse y además ver en la oscuridad, ya se encuentran cerca de ello.
Descuiden falta poco para todos estos metagadgets biológicos.
¿Se acuerdan de esas películas donde aparecía el vendedor de crecepelo en su carromato?
Los vendedores de genes están a punto de aparecer.
En china ya se están empezando a hacer los experimentos transgénicos en humanos, pues muchos chinos no tienen nada que perder respecto a estos implantes, y a cambio de colaborar con la ciencia se llevan buenas pagas.
¡La era de los mutantes ha llegado! ¡Vengadores Reuníos! Como dirían en los comics de Marvel.
Sin embargo, lejos de la ciencia ficción y cerca de spíderman o los licántropos, hemos empezados a hacer humanos mutados.
Hombres lobo, hombres murciélago, hombres anfibios, hombres planta, todo lo que puedan imaginar, y que servirá para curar o salvar dificultades físicas o mentales.
Pero no se lo crean del todo… pues toda invención conlleva su perversión armamentística.
¿Qué sería de un ejército que no quisiera tener los mejores soldados con las mejores capacidades físicas y mentales? Fuerza descomunal, adaptación al frío y al calor, visión de halcón, tóxicos de rana en la piel para usarlos a voluntad, o veneno de cobra. Quizá la electricidad de la manta raya, la piel endurecida del rinoceronte, la agilidad de un puma, o la velocidad del guepardo. No tener que comer por realizar la fotosíntesis gracias a una piel parecida a la de las plantas, y capaz de regenerarnos como la estrella de mar.
¿No sienten ya ese aleteo en sus espaldas como los futuros soldados voladores?
Es un mundo de posibilidades tan vigorizante que estoy deseando poder ponerme unos ojos como los de Ridick. ¿Se imaginan poder captar más espectro del que vemos inicialmente?
¿Qué sería de un policía con olfato de perro, capaz de detectar la cocaína sin necesidad de verla? A un perro hay que enseñarle lo que hay que oler, entrenarle sobre lo que queremos que busque. Los humanos poseemos la inteligencia, solo tendríamos que detectarlo. Imaginen que un perro es capaz de oler varias cosas a la vez, y no solo eso, también se entera de quien estuvo allí hace una semana y hasta donde lleva su rastro. El olfato de sabueso en un policía sería la perdición de todos los cacos.
Pero claro, seguramente, ellos podrían ponerse genes de mofeta o algo parecido para repeler su búsqueda.
¿Y que hay de la belleza? O la gran belleza que podríamos descubrir en los humanos, si su transgenia fuera por motivos estéticos!!!
Plumas, pieles, pelo, tinturas camaleónicas, escamas, flores naturales, fragancias irresistibles a lo Patrick Süskind en“el perfume”…
¿Quién no quiere ser transgénico aún?
¡Tengo un frasco por 5 centavos en mi carromato!