Hostia puta (III)

Escrito por Eva Cuervo el .

hostiaputa31

Trocitos.

Tengo el mismo médico desde los 14 años. El ahora andará por los 60, la papada le ha borrado el cuello, tiene los ojos saltones y tristes. Respira por la boca y jadea como un puto jabalí. Tiene aires de suficiencia, de sobrado, a algunas personas les pasa cuando llevan una bata blanca, pero luego sin el envoltorio no valen para una mierda. Se supone que debía ir a verle cada seis meses, o por lo menos una vez al año. He pasado años sin verle el jeto. A no ser que necesite algo de él, por lo general su firma para alguna historia, no voy. No voy porque ahora yo sé más de lo que me pasa que él. Es así.

Mi enfermedad es hereditaria (autosómica recesiva, para el que entienda) pero mi familia no la ha heredado. Intentaron seguir el rastro de alguna mutación, alguien que hubiese tenido algún síntoma en mi familia y no encontraron nada. Mi padre mutó por su cuenta, mi madre por la suya. La probabilidad de mutar un gen es mínima, la de coincidir con otra persona con la misma mutación es la misma de que te toque el euromillón. Así que soy una especie de paciente 0. Mi hermana pilló el cacho bueno, siempre hace igual la cabrona.

A mi médico le piden trocitos de mí otros médicos de otros países. Para eso si voy. La primera vez fue un equipo de médicos franceses, querían un trozo de músculo para hacer sus cosas científicas, que si hacía el favor. No vas a decir que no, es para la ciencia.

Estaba tumbada boca abajo en una camilla. Mi médico y otro médico francés estaban de palique mientras me abrían la pierna, justo debajo de la rodilla. Cortaron un trozo del tamaño de una nuez. Recuerdo al francés metiéndolo en una especie de tupper con bolsas de hielo. Lo cerró y salió corriendo como si llevase una puta esmeralda. Ni au revoir dijo, el gilipollas. Luego mi médico me dijo que habían secuenciado mi ADN, que había unas cuantas personas por ahí que sabían más de mí que yo. Hhmmmm....No creo.

Otras veces me hicieron agujeros en la espalda para llevarse unos centímetros de piel, con una especie de compás con cuchilla que cortaba una circunferencia perfecta. No me gusta el dolor, para dejarlo claro, pero lo de cortar y coser, las heridas abiertas, las cicatrices, tienen algo que me mola. Esto no lo vayáis contando por ahí.

La mayoría de las veces solo querían sangre. Siempre he pensado que a lo mejor flipaban un poco con aquellas muestras, porque por aquella época yo iba más bien puesta de continuo. Nunca dijeron nada, aunque tampoco creo que le hubiese extrañado a nadie.

Espero que se lo estén repartiendo bien.


hostiaputa33Parecía que sí... (I)

Yo tenía 23 años. Por esa época tenía el horario de un vampiro, leía en la cama hasta muy tarde y me levantaba al mediodía. Eran cerca de las 12 de la mañana, llamaron por teléfono y oí a mi madre hablar con mi médico. Que subieramos al día siguiente, a la hora que fuese. Pensaba que querrían alguna muestra. De vez en cuando llamaban para pedirme muestras de sangre, tejido y así. Vale, subimos.

Cuando le dimos aviso a la de recepción llamó por teléfono y salió una enfermera de una sala, que la acompañáramos. Nos llevó a un despacho donde estaba mi médico. No era donde nos atendía siempre, supongo que para que los demás no vieran que nos atendían sin haber esperado. No sé.

Empieza a contarnos que en el Hospital universitario de Ohio, en EE.UU están reclutando a gente para un ensayo clínico en fase 3 de una terapia génica para el tipo de enfermedad que yo tengo. Que quiere que vaya yo. Que ya había hablado con el equipo que hacía el ensayo. Que dijera que sí y ya está. Que ellos se encargaban de todo, de tramitar el visado, el vuelo, la estancia.

Estaba soltando todo aquello y yo no sentía una puta mierda, me quedé allí con cara de nada. Mi médico se levantó y me cogió la cara, quería que le mirase a los ojos. Le miré. Solo dijo 'funciona'. Creo que le faltó el canto de un duro para soltarme un beso en los morros. Dije 'vale'.

Que nos llamaría cuando estuviera todo arreglado. Mi madre y yo ni nos miramos, volvimos a casa sin abrir la puta boca.

Durante varios días me despertaba pensando que lo había soñado. Me compré un libro sobre Ohio, pensando qué putas iba a hacer yo en Ohio, cómo coño se pilla costo en Ohio.

Cuando en mi casa empezamos a pensar que igual sí, que parecía que sí, se lo dijimos a mi familia. Se lo dije a mis amigos.


hostiaputa32Parecía que sí... (II).

Nos fuimos de vacaciones. Siempre nos íbamos en agosto. Pasó ese mes y el siguiente mes. No sabíamos cuánto tardarían en llamar pero empezaba a parecer raro. Llamé yo. Me costó varios intentos poder hablar con mi médico, no quería coger el puto teléfono. Cuando conseguí hablar con él sólo me soltó un par de frases que no decían nada. Ah, sí, sobre eso, ya hablaremos...

Con los datos que tenía empecé a buscar información en internet. Salía en la prensa y en varios artículos sobre medicina. Jesse Gelsinger, un chaval que participaba en un ensayo de terapia génica para una enfermedad hepática había muerto. No hicieron bien el filtro y eso bastaba para darse cuenta de que la estaban cagando mucho. La FDA suspendió todos los ensayos de terapia génica que había.

La siguiente vez que vi a mi médico no me miró a la cara. Él no tenía la culpa, pero hostia, joder, ¿hacer como si no hubiera pasado nada? ¿En serio, puto miserable, hijo de la gran puta?

A parte del cabreo, aquello no me puso triste ni de ninguna forma. Seguí con mi vida y ya está.Obviamente esto no es verdad, pero ya escarbaremos ahí otro día.

Parecía que sí. Pero no. Han pasado 20 años.


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