Chupadme la barriga

Escrito por Daniel Prieto el .

prieto771

Tengo la sensación de que estoy perdiendo el tiempo. Me parece como que estoy perdiendo mi vida. Me parece como que estoy perdiendo dinero. Me parece que lo estoy perdiendo todo. Tengo cuarenta y tres años y aún estoy esperando a que mi vida empiece. Voy encadenando trabajos de mierda hasta que mi suerte cambie, ya sabes. Es lo que hay. La vida es así. Hay que luchar. Vamos tirando. Registrarte en Infojobs. Vamos tirandillo. Registrarte en Linkedin. Abur, yogur.

prieto772Reclamo la soberanía de mi barriga frente a la tiranía de los espurios. Reclamo mi derecho a regodearme en los volúmenes perfectos de mi barrigón y sus curvas sublimes. Reclamo mi derecho a solazarme en mi propia orondez. Mi barriga es mi reino, mi reino por un bocadillo. Reclamo mi derecho a sentirme un verdadero ser humano y no un maniquí. Reclamo la obligación de que os inclinéis ante la grandeza de mi estómago porque he comido cosas que no creeríais. Repudio vuestros vientres planos y sin alegría, esculpidos artificialmente al ritmo que la turba musculada manda. Macrobiótico. Cojonótico. Hago cardio. Me hago pajas. Chupadme la barriga.

Me pasa como a Woody Allen, siempre que veo a una tía en lo primero que pienso es en tirármela. Le escuché decir algo así en una entrevista y ese día dejé de pensar en que yo era una especie de pervertido. En lo primero que pienso cuando tengo a una mujer delante es en follármela. Es algo que no puedo controlar. Luego entra en juego todo ese rollo decimonónico de lo caballeresco, tan pasado de moda ya. Somos más o menos caballeros en la medida que refrenemos o no esas ganas de ponerla a cuatro patas y disfrazamos el deseo con cumplidos, halagos y demás ñoñerías. Esto último se lo leí a Umbral en alguna parte.

Esa horrible sensación de tener trabajo.

prieto773Hay muertos vivientes, los puedes ver paseando por los centros comerciales, en los gimnasios o haciéndose selfis en los precipicios. Cuando te miro a los ojos me traspasan tus precipicios negros. Siempre que me asomo a un precipicio pienso en saltar. Pienso en lo fácil que sería terminar con toda una vida de cordura por una única milésima de locura. Pienso realmente en la posibilidad de hacerlo y casi siempre me asusto de mí mismo y al final me separo casi involuntariamente del borde. Dicen que caer al vacío es una experiencia tan brutal que tu cuerpo genera una burrada de adrenalina y casi ni te enteras cuando impactas contra el suelo... lo malo es si sobrevives. Habría que ver si es verdad. Ahora todo es mentira. Todo lo que creíamos resulta que era una puta mentira y cada vez nos quedan menos cosas a las que aferrarnos. Nerón no prendió fuego a Roma, el cerebro no lo aprovechamos al cien por cien, Gandhi era una buena persona...

Creéis que sin una barriga como Dios manda sois mejores pero solo sois un montón de mierda fitness prefabricada. Os diseñan desde despachos de pederastas de Florida y pagáis por ser sus putitas. Sois gilipollas detox, retrasados del ayuno intermitente. Decís que os gusta cuidaros pero es mentira porque solo mimáis vuestra finísima capa que toca el exterior, solo se trata de mostrar lo de fuera, lo superficial. Por dentro sois asquerosos. Decís que os cuidáis mucho, hijos de puta, ¡menudo mérito de los cojones! Pero no os importa una mierda el pobre desgraciado que tenéis al lado. Os cuidaríais mucho aunque supiéseis que el resto de la Humanidad agonizase. Seguiríais yendo al gim aunque el resto de vuestros supuestos compañeros estuviesen conteniendo una invasión zombi en las trincheras. Os seguiríais echando vuestros potingues aunque supiéseis que los elaboran a base de niños asesinados.

prieto774Busco en google en qué año estamos. Hay laberintos por los que nos peleamos para entrar. Hay días en que sería mejor no acostarse. Y hay gente que está muerta del todo, normalmente hacen directos en Internet. A veces estoy navegando en Internet, casi siempre mientras cago, y me saltan anuncios de unos chavales majísimos que están dispuestos a explicarme el secreto de cómo se han hecho millonarios en dos meses. Qué majos que son. También me saltan anuncios por si quiero follarme a señoras de sesenta años totalmente gratis. Y otros anuncios de otros tíos que me invitan gratis a una clase en su cursillo para que me haga millonario con las criptomonedas o no sé qué cojones. Qué fácil es hacerse multimillonario hoy en día, hay una competencia feroz por darte la fórmula secreta, hay ostias para contarte cómo se hace. Qué buena es la gente, joder.

Me río de vuestros cuerpos sifilíticos conseguidos en pos de un sacrificio que no es tal. Vosotros seguís la corriente. Yo sí me sacrifico contra vuestra tiranía estética con la inmensidad de mi barriga, que desafía vuestros abdominales y vuestros bíceps y por supuesto vuestros cerebros crossfit. Sacrificio es tener barriga, hijos de puta. Sacrificio son mis tetas bamboleantes y mi ombligo que parece querer salirse hacia afuera. La piel tensada alrededor de mi estómago -¡bendito seas!- que brilla orgullosa bajo el sol de verano. Piel hermosa de barriga gorda. Me sacrifico porque no estoy de acuerdo con ese aspecto tísico y de gilipollas que tanto asco da. Me sacrifico porque escupo desde mi ventana a los runners que ven todas las series de Netlix, de HBO, de Disney Plus, de Movistar, de Amazon Prime y de Filmin y luego salgo a sentarme en un banco a verlos pasar, con una cerveza en la mano y un pitillo encendido.

prieto775Mi tiempo perdido, que no llega a nada, mi vida partida a la mitad, tengo veinte minutos para comprar todas las cosas en el súper. Me acaba de llamar María porque al final vuelve a casa a las ocho y media así que no le da tiempo a hacer la compra. Puta casualidad que es sábado y está todo abarrotado. Estoy en el parque con los niños y entonces viene mi madre y le pido si me puede quedar un rato con los niños. Me dice que si es "solo un rato" sí. Le contesto que "veinte minutos como máximo" y entonces corro a hacer la lotería porque se lo prometí a Norma. Entrego los boletos que ella me dio y resulta que nos habían tocado seis euros. Voy bien de tiempo si me doy prisa y hago rápido la compra. Entro a toda leche en el Eroski, meto todas las cosas en el carro cagando ostias y me dirijo hacia la caja que menos gente tiene: solo hay una señora con cuatro cosas y ya va a pagar... puede ser una trampa. "Le digo que le faltan veinte céntimos", le repite la cajera a la señora con cara de circunstancia. La señora ha caído en esa abominación en que caen muchas señoras consistente en llevar mallas ajustadas, a lo mejor hace crossfit. LLeva una bolsa de judías, un bote de garbanzos, una barra de pan de esas de plástico y un paquete de Avecrem. Rebusca en una cartera negra mirando las monedas una por una mientras pienso en pagarle yo mismo su compra. El tiempo parece ir como en cámara lenta y empezamos a mirarnos unos a otros los que estamos en la cola, con cara de gilipollas. La cajera sigue esperando a que la señora haga algo. Podría explotar la bomba atómica en ese mismo instante. Podría producirse la segunda venia de Cristo. "No le llega, eso son dos céntimos y esas son de un céntimo". Resulta que la señora tiene dinero para comprarse unas mallas atemporales pero no tiene veinte céntimos para pagar un paquete de putas judías. Entonces, como en un cruel guiño del destino, echa la mano al bolso y saca otra cartera más pequeña. "Espera a ver si tengo aquí". ¡LA CAJERA NO ESPERA, HIJA DE PUTA, QUE TIENE QUE HACER SU TURNO, ESPERAMOS TODOS ESTOS GILIPOLLAS QUE ESTAMOS MIRANDO PARA TU PUTA ESTAMPA! Entonces, en otro excelente giro de guión, le pide a la cajera que ponga la mano que le va a echar "toda la chatarra".

prieto776Me cago en esa virtud banal en la que os arrogáis para osar decirnos cómo debemos ser puros... vosotros, que habéis olvidado lo que significa la verdadera virtud; vosotros, borrachos de vosotros mismos, engreídos y egocéntricos hasta lo absurdo. Vosotros, putos gilipollas. Mirad mi barriga gorda y sudorosa, pero verdadera y solo mía, mirad mi orgullo y mi pensamiento crítico e intuid mi polla y mis cojones debajo... preparados siempre para la acción. Habéis olvidado los motivos. Repudio vuestros sacrificios balbuceantes. Meo en vuestros batidos de proteínas y en vuestras bebidas hidrofiliocifolladas. Proclamo que no hay mayor grandeza que pasear mi vientre henchido de placeres frente a vuestra idolatría disparatada.

Esa horrible sensación de no tener trabajo.

Imprimir